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Si siempre has querido aprender un nuevo idioma, terminar el
libro que tienes en tu mesa de noche,
bajar los kilos demás y tantas cosas más,
pero no lo logras, es porque seguramente tienes malos hábitos y es necesario
cambiarlos si quieres alcanzar tus objetivos.
Todos los días realizamos actividades automáticamente (desde cepillarnos los dientes, hasta atarnos los cordones de los zapatos), sin embargo, cuando queremos hacer un cambio en nuestra vida nos cuesta demasiado y ponemos excusas al ver que no obtenemos los resultados esperados más aun sabiendo que no nos esforzamos lo suficiente al realizar las tareas necesarias para lograr estos objetivos.
Los hábitos se aprenden no nacemos con ellos, por eso es importante tener buenos hábitos y crear nuevos para mejorar nuestra calidad de vida, además,
los hábitos ayudan a moldear nuestro carácter.
Cuando repetimos algo durante 21 días, esto ya se ha convertido en un hábito.
Lo mejor es tener un objetivo en mente, trabajar en él y no tener varios al tiempo para no frustrarnos, así que se debe elegir uno, elige el que sea más importante para ti y trabaja en ello.
Quiero enseñarte una técnica fácil para crear nuevos hábitos se llama COMERTE
CO: concreto, el hábito debe ser concreto (1 a la
vez)
ME: medible, el reto debe ser medible
R: realizable, hay que poner los pies en la tierra, que
sea un reto ambicioso, pero a la vez alcanzable
TE: debemos situarlo en el tiempo
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Datos importantes
Fundamental que identifiques cual es el hábito que quieres cambiar
Mantén tu autoconfianza, olvídate de todos los peros y excusas (pero no puedo, pero no tengo tiempo, pero y más peros)
Empieza con pequeñas acciones por ejemplo ese libro que miras con el rabillo del ojo todas las noches y que no terminas de leer pues puedes empezar con leer 5 hojas, al día siguiente lees otras 5 y pasado puedes leer ya 10 hojas y cuando menos te des cuenta ya has terminado el libro. Puedes crear tus propias técnicas, que se adapten a tu estilo de vida y a lo que quieres conseguir
Persevera, no permitas que un pequeño tropezón te impida avanzar, recuerda que la repetición crea el hábito
La automotivación es clave fundamental, ten presente tu meta y los beneficios que obtendrás, si es necesario rodéate de personas que te puedan ayudar, que te inspiren a lograr tus objetivos.
Nadie ha dicho que el cambiar o crear un hábito sea cosa sencilla, como todo requiere esfuerzo y perseverancia por eso la mejor manera de hacerlo es paso a paso, ir lento pero constante, cuando decimos que ubicar nuestra meta en el tiempo no es correr y pensar que de la noche a la mañana vamos a cambiar aquello que queremos, de acuerdo con nuestro estilo de vida, a nuestras capacidades debemos organizar nuestro tiempo. Recuerda… paso a paso e ir en aumento.
No te frustres si en el camino recaes en tus viejas rutinas – ojalá que no suceda – pero si es el caso, haz un alto y analiza qué fue lo que sucedió, porqué volviste a esa vieja rutina, qué te motivo a retomar esas viejas acciones, no te critiques ni juzgues, busca las posibles soluciones, revisa tus objetivos, por ejemplo si tu meta era consumir 5 porciones de fruta diarias puedes reducirlo a 3 y así puedes empezar nuevamente y fomentar esa rutina. Recuerda los beneficios de tu nuevo hábito.
Busca recursos que te motiven y te enfoquen a lograr esos retos, coloca alarmas en tu móvil, escribe en tu libreta tus metas, haz un letrero que puedes colocar en tu habitación, en tu lugar de trabajo o en algún lugar que puedes verlo fácilmente y te recuerde tu rutina.
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¡El que persevera ….. alcanza!
Este artículo es de carácter informativo. En caso de presentar alguna condición o malestar, acude a un especialista en la salud.
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